LUZ DE GAS


de Patrick Hamilton

Elenco


ACTORES: Patxi Freytez, Cecilia Freire, Juan Mesenguer, Marisa Lahoz, Marta Guitérrez-Abad, Carlos Varela y Fernando Gómez Cobo.
AUTOR: Patrick Hamilton.
ESCENOGRAFÍA: Alfonso Barajas.
ILUMINACIÓN: Juanjo Granda.
VESTUARIO: Cornejo.
DECORADOS: En Equipo/F.Cobo.
MAQUILLAJE: Chema Noci.
FOTOGRAFÍAS: Sergio Parra.
DIRECCIÓN: Juanjo Granda.
DIRECTORA DE PRODUCCIÓN: Marisa Lahoz.
PRODUCCIÓN: Salvador Collado.

Argumento


El matrimonio Manningham, Jack y Paula, viven en una casa acomodada de un barrio londinense. Les asisten Elizabeth, ama de llaves y cocinera, y Nancy, joven sirvienta. Jack se preocupa por la salud de su esposa viendo que se deteriora progresivamente. Paula no comprende lo que le ocurre, no se da cuenta de cómo suceden las cosas que denuncian sus deficiencias mentales. Según expresa su marido, pierde y oculta objetos tanto de él como de ella; y realiza acciones que luego olvida, como quitar un cuadro de la pared y ocultarlo detrás de un mueble. Por su parte, Paula se encuentra aterrorizada porque escucha ruidos en el último piso de la casa cuando su marido sale, al caer la tarde, a realizar gestiones de manera habitual. El piso donde se oyen los ruidos permanece siempre cerrado desde que se trasladaron a esa casa. Los ruidos coinciden con una bajada de la presión del gas, combustible con que se ilumina la casa, con la consiguiente perdida de intensidad de la luz.

Paula se encuentra abatida por último episodio de su enfermedad; se encuentra sola porque su marido acaba de salir a cumplir con sus gestiones cotidianas. Elizabeth. después de lamentar el estado de su señora, la presiona para que reciba una visita. El inspector Rough se presenta ante ella con el propósito de ayudarla a superar su situación para lo que le pide que confía en él y le cuente lo que le sucede. Paula explica al Inspector el asunto de su perdida de memoria; igualmente le cuenta el terror que le producen los ruidos del piso superior y la ansiedad que le provoca la bajada de la intensidad de la luz del gas. El Inspector, tras unos rodeos preparatorios para conseguir que no se impresione demasiado, le cuenta la historia de un crimen cometido en esa misma casa hace 20 años y que continúa sin resolver. El móvil de dicho asesinato fue el deseo de apoderar de una valiosa colección de rubíes pertenecientes a la Sra. Barlow, la anterior propietaria del inmueble. El Inspector le comunica las investigaciones realizadas y le comunica que el asesino, sobrino lejano de la Sra. Barlow, es su marido y que además la ha engañado con su matrimonio ya que está casado con otra mujer que aún vive y por tanto ante la ley las segundas nupcias no son válidas. En esos momentos la luz del gas baja y comienzan los ruidos en el piso de arriba. Ambos saben que se trata de Jack, que busca entre los muebles y objetos que mandó trasladar allí y que pertenecían a la antigua propietaria, el escondite de los rubíes. Paula se resiste a crear la historia del Inspector, por fin la convence para abrir el buró que usa Jack y que mantiene cerrado con llave; se trata de encontrar documentos que sirvan de prueba para inculpar a Jack. En esos momentos la luz sube de intensidad: Jack deja el piso superior y en unos minutos volverá a entrar en la casa. Es necesario que el Inspector salga de la casa o se oculte. Lo hace en un cuarto vestidor anexo al salón. Paula se marcha a su habitación, seguida de Elizabeth.

Jack regresa para asearse y volver a salir; mantiene una escena con Elizabeth marcada por la tensión que soporta Elizabeth sabiendo que el Inspector se encuentra oculto en el vestidor que Jack está ocupando. Se marcha Jack y regresa Paula. El Inspector consigue abrir el buró y Paula descubre todos los objetos desaparecidos que constituyen el historial de su enfermedad, y una carta de su primo del que no sabía nada desde que se instalaron en esta casa. Se sincera con el Inspector y se ofrece a ayudarle en lo que necesite. Por medio de un camafeo perteneciente a la Sra. Barlow, que Jack había regalado a Paula y que ésta había perdido hacía un tiempo, y que se encuentra entre los objetos del buró, se descubren los famosos rubíes. Con esa prueba el Inspector pone en marcha el plan para apresar a Jack. Manda a Paula a su habitación con la recomendación de no salir de ella hasta que él regrese con la orden de arresto y ayuda policial.

Transcurren unas horas y Jack regresa de sus escarceos nocturnos; según hemos sabido por el inspector esos escarceos consisten en visitar bares y prostíbulos donde mantiene con frecuencia relaciones sexuales. Llega al mismo tiempo que Nancy, y fingiendo una escena de llamada al orden, acaban teniendo una relación erótica después de la cual deciden quedar fuera de la casa para verse a escondidas de Paula. Jack descubre que el buró ha sido forzado; llama a Paula que se niega a bajar. Por medio de una sucia estrategia consigue que Paula salga de la habitación y se presente ante él. La tensión que se genera, casi violencia, se ve truncada por la aparición del Inspector que, ha llegado antes que Jack y se ha escondido en el cuarto vestidor.

Se quedan solos los dos hombres y comienza una escena final donde el Inspector desmonta toda la mentira de Jack y lo pone ante las cuerdas. Jack intenta escapar para lo que usa un revolver que tenía en el buró, pero el Inspector ha vaciado el cargador previamente, llegan dos policías que impiden el intento de huida de Jack y entre estos y el Inspector someten al asesino. En ese instante entra Paula y ruega al Inspector la deje a solas con Jack. Después de una escena donde la mujer se burla con sarcasmo y dolor de su agresor; el Inspector y los policías se llevan al asesino. Termina la historia; pero cuando Paula se queda sola con Elizabeth comprobamos que el daño psicológico es irreparable y que Paula va a tener dificultades en el futuro.

Ficha Técnica


Espectáculo: LUZ DE GAS

Espacio escénico: Alfonso Barajas
Iluminación: Juanjo Granda
Vestuario: Cornejo
Fotografías: Sergio Parra
Dirección: Salvador Collado
Fecha de estreno: 28 de septiembre de 2009
Lugar de Estreno: Teatro Olimpia (Huesca)
Duración aproximada: 1 hora 45 minutos

Personal Artístico de la Compañía: 7 actores.
Personal Técnico de la Compañía: 3 técnicos.
Personal que aporta el teatro durante el montaje y desmontaje: 1 Director técnico o Jefe de escenario. 1 Técnico de Iluminación. 1 Utillero. 1 Planchadora.
Personal que aporta el teatro durante la representación: 1 Eléctrico. 1 responsable técnico y de sala.
Iluminación: Mesa Programable. Proyectores. Canales. Audiovisuales.
Maquinaria: El escenario estará limpio de obstáculos y elementos de otros espectáculos. Foro negro. Paso libre de un hombro a otro del escenario por detrás del foro. Posición de los elementos escenográficos a determinar.
Sastrería: 1 Planchadora.
Camerinos: 7 individuales o 4 dobles.
Deberán estar equipados con lavabo, mesa, sillas, espejos, luz apropiada para maquillarse y percheros. Se encontraran limpios y en perfecto orden a la llegada de la compañía. En el caso de que los camerinos no tuvieran baños, se deberá disponer de duchas y aseos en un lugar próximo a los mismos.

Comparte esta obra en: